Cómo fortalecer nuestro sistema inmune

Nuestro sistema inmune es el encargado de combatir a los agentes externos que pueden causarnos daño, previniendo así que nos enfermemos. Es por eso que debemos darle lo necesario para que pueda funcionar de la mejor manera.

Hay diversos hábitos que podemos incorporar o mejorar para proteger y potenciar las funciones de nuestro sistema inmune. Dentro de estos hábitos, entra la alimentación, que es uno de los aspectos más importantes a la hora de mejorar nuestra salud general.

Hay alimentos que se piensa son particularmente buenos para elevar nuestras defensas, sin embargo, muchas veces pueden ser más costosos, fuera de temporada o difíciles de conseguir, por lo tanto, lo mejor que puedes hacer es comer lo más variado y balanceado que puedas, incluyendo en todas tus comidas distintos grupos de alimentos.

Hay diversos aspectos de nuestra alimentación que podemos mejorar, sin embargo, no es necesario cambiar radicalmente todo de la noche a la mañana. Por ejemplo, podemos empezar por pequeños cambios, como:

• Aumentar el consumo de frutas y verduras, que nos entregan diferentes vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra. Idealmente, intenta llegar a las 5 porciones de frutas y verduras al día.

• Aumentando el consumo de legumbres, que nos aportan proteínas, además de vitaminas, minerales, fitoquímicos y antioxidantes. Además, son bajas en grasa y sodio. Intenta consumirlas mínimo 2 veces a la semana (si es más, mejor aún!).

• Aumentando el consumo de semillas y frutos secos (sin sal ni aceites añadidos), que nos entregan ácidos grasos esenciales para nuestro cuerpo, además de proteínas y fibra.

Si quieres hacer aún más cambios, intenta además preferir productos:

• Naturales: es decir, mínimamente procesados, similares a cómo los encontramos en la naturaleza; o sin la adición excesiva de ingredientes. ¡Lee los ingredientes en los empaques!

• Enteros: alimentos en su forma original, por ejemplo, consumir con mayor frecuencia frutas y verduras enteras y con cáscara en vez de consumirlas regularmente en jugo.

• Granos integrales: contienen el grano entero, sin refinar, lo que confiere mayor calidad nutritiva y aumentan la saciedad por más tiempo.

Finalmente, evita los productos ultra-procesados, que son altos en azúcar, sodio y grasas saturadas, que si son consumidos frecuentemente dañan nuestro cuerpo.

Otros hábitos

que ayudan a nuestro sistema inmune:

Realiza ejercicio físico

El ejercicio fortalece nuestro sistema inmune, al mismo tiempo que nos ayuda a dormir mejor y reducir los niveles de estrés/ansiedad (aspectos que afectan nuestra inmunidad). Siempre que sea posible, intenta ejercitarte al aire libre para aprovechar la naturaleza y el sol, que nos ayuda a producir vitamina D. Se recomienda hacer al menos 150 minutos de ejercicio físico moderado a la semana.

Duerme lo necesario

Cada uno necesita diferente cantidad de horas, pero el promedio general es 8 horas diarias. Suficiente cantidad y calidad de sueño impacta directamente en nuestro sistema inmune. Si quieres saber un poco más acerca de este tema, puedes leer el post anterior aquí: https://aialarcon.wixsite.com/nutritravel/post/the-impact-of-sleeping-in-our-health

Maneja tu estrés

El sentirse estresado por largos periodos puede impactar negativamente en nuestra salud. Intenta realizar ejercicios de relajación, meditación, yoga, o lo que más te acomode para manejar tu estrés.

Mantente hidratado

Asegúrate de tomar suficiente agua. la sed aparece cuando ya estamos comenzando a deshidratarnos asi que no esperes a sentir sed. Intenta llegar a los 6-8 vasos de agua al día.